Ushuaia

Clima en Ushuaia

La mejor época para visitar Ushuaia se podría decir que es el verano austral (diciembre a febrero) pero como siempre dependerá de tus preferencias y de lo que quieras experimentar.

El clima en Ushuaia es oceánico subpolar, caracterizado por temperaturas frías y precipitaciones relativamente altas durante todo el año además de épocas con fuertes vientos sobre todo entre agosto y enero.

A continuación te presentamos una descripción general del tiempo en Ushuaia por temporada:

• Verano (diciembre a febrero): el clima es relativamente templado, con temperaturas diurnas que oscilan entre 5 °C y 15 °C. Es el mejor momento para realizar actividades al aire libre, como caminatas, observación de vida silvestre y cruceros por el Canal Beagle. Además, un dato muy importante para vacacionar, es que los días son muy largos con casi 17-18 horas de luz en diciembre.
• Otoño (marzo a mayo): las temperaturas comienzan a ser más frías y aumentan las lluvias. Sin embargo, los colores del otoño siempre hacen hermoso cualquier pasaje y en Ushuaia no es la excepción. Además hay menos turistas lo que también ofrece una mayor tranquilidad.
• Invierno (junio a agosto): el clima en esta temporada es extremadamente frío (a menudo bajo cero) pero es el momento ideal para los aficionados a los deportes de invierno como el esquí y el snowboard. Hay varias estaciones de esquí y las zonas circundantes ofrecen excelentes oportunidades para actividades invernales.
• Primavera (septiembre a noviembre): es una temporada de transición entre el frío extremo y las temperaturas un poco más agradables. Los días se hacen más largos poco a poco y es un buen momento para practicar senderismo y actividades al aire libre pero es posible que se encuentre algo de nieve persistente y condiciones húmedas en los senderos.

También hay que tener en cuenta que con el actual calentamiento global las condiciones del tiempo pueden ir variando año tras año por eso es bueno consultar el pronóstico en Ushuaia unas semanas antes de viajar para ir bien preparado, pero lo que es seguro que siempre será necesario algo de abrigo.